URBANISMO ANALÓGICO

Resulta que ayer tuve que ir a un velatorio. El hijo de un vecino sufrió uno de esos "ataques" que obligan al que lo padece a quitarse la vida. Murió. Decía mi abuela que lo más triste que le puede pasar a una persona es sobrevivir a sus hijos.

La historia es triste. El hombre estaba en trámites de divorcio y vista la vida de mierda que le iba a quedar tras la separación, manteniendo a su ex-mujer (que no trabaja) y a sus tres hijas pero sin poder ver a estas últimas, todo esto con el mísero sueldo de un repartidor de una empresa de 2ª, decidió escoger el camino más rápido, pero el más doloroso, ya no para el, sino para sus padres y hermanas.

El caso es que el hombre tenía tres hijas de
entre 22 y 16 años, por lo que las puertas del tanatorio estaban llenas de chavales de ese rango de edad que venían a darle el pésame a sus amigas. 

Pero cual es mi sorpresa cuando observo que una de ellas, la más joven, que iba ataviada con una sudadera de capucha y un pantalón de chandal de los que se ciñen a la pierna a la altura de los tobillos, junto con unas zapatillas "victoria", a cada cual de las prendas más llena de mierda; va y comienza a comerle la boca al novio y entre lengüetazo y lengüetazo les dice a sus colegas, entre risas:

"- nada tía, estoy bien, no es para tanto". 

Alucinado comienzo una crítica por lo "bajini" a mi esposa cuando me corta, sabiendo lo que le iba a decir y asesta con voz de mala ostia: 

"- A estas les falta sacar los cubatas."

Y es que una cosa es lo que uno se crea que aparenta ser y otra muy distinta es la imagen real que proyecta. Vamos que la chavalita se creía que estaba a la última, pero hasta su abuelo, que diariamente anda con la ropa llena de mierda por dedicarse a la ganadería, llevaba una camisa, un jersey y un pantalón límpios al entierro de su hijo.

Me cago en las putas modas. Van de modernos y parecen auténticos aldeanos.

Como complemento, ya que me ha quedado un pelín corto os dejo este enlace a un artículo sobre moda "bacala"